La banda mexicana cumplió 18 años y lo festejó a lo grande en el Auditorio Nacional. El público espero pacientemente hasta que se abrieran las puertas e iban con toda la actitud para divertirse, a tal grado que la fiebre mundialista no se hizo esperar en el recinto y como si estuvieran en un estadio, los gritos de “ehhhh puto” y “no era penal” no se hicieron esperar, además de hacer la famosa ola una infinidad de veces mientras esperaban a que la banda saliera.
Molotov abarcó cerca de 2 horas con temas de su nuevo disco Agua Maldita y otros sencillos que ya forman parte de su setlist desde hace años. Olere Y Olere Y Olere Y El UHU, Lagunas Metales, La Raza Pura Es La Pura Raza y Ánimo Delincuencia tuvieron un gran recibimiento por parte de los espectadores, mientras que canciones como Chinga Tu Madre, Puto, Frijolero, Gimme The Power y Here We Kum, encendieron los ánimos. La sorpresa para muchos fue Molotov Coktail Party, Parasito, Hit Me y Rastamandita, rolas que a pesar de ser muy famosas, no tocan con mucha frecuencia.
El humor de los músicos estuvo presente en cada canción, la carrilla y las burlas son parte del show del cuarteto, quienes se atrevieron a invitar a su público a abandonar sus lugares para armar el slam en los pasillos de los asientos. Molotov es y será una de las bandas más importantes del país, pues sus temas no caducan, son irreverentes y combinan la triste realidad con sarcasmo y diversión. Definitivamente, sólo podíamos esperar de este concierto rock and roll y desmadre.
Por Yuri Nava
Fotos: @Yurfus_D